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jueves, 6 de mayo de 2010

MUJERES ASTURIANAS: CONCHA MADERA,MI ABUELA Y OTRAS AMIGAS...




Mira Carmen, es que pongo este título pq nos han mandado hacer los deberes para el jueves que viene, que es el jueves de las blogueras, eso que te conté el otro día, que nos reunimos muyeres para hacer blogs,como este mío...vale....este blog nuestro...

Pues una de las cosas que tenemos que hacer es escribir un día sobre mujeres asturianas, y no, no vale ponerte a tí, que tengo que contarte algo sobre alguna, y yo como soy así, pues voy a hablar de dos....o más....

Te acuerdas de Concha Madera?...sí mujer, aquella señora mayor que siempre nos contaba cosas de la guerra en Oviedo?

A mí me maravillaba, siempre tan activa, tan combatiente, con esa energía a los 70 años,igual que si tuviera 20.

Me acuerdo un día que íbamos por El Fontán y nos contó que ella había reunido en un mitin a 14.000 almas allí, y yo maravillada.

Siempre que voy al mercado me imagino a todo ese gentío llenando El Fontán, y creo verla a ella apasionada, subida encima de algo, y arengando a esas 14.000 almas...y me sigo emocionando ahora al recordarlo.

Era una mujer grande, animosa, cariñosa e implacable. Siempre nos reñía pq hablábamos con los fachas de Derecho, y nos decía: "no vayáis ni a tomar el café con ellos, de los fascistas no os podéis fiar"...

Era la tía de José Ramón , el novio de Belén "la gallega", mi amiga y camarada de, y desde, entonces.

Belén me llamó muy afectada por lo tuyo, que ella 20 años después sigue recuperándose de aquella tarde en la que J. Ramón no volvió de Gijón, que se quedó en la autopista para siempre.

Pero no nos vamos a poner tristes, que luego la gente que nos lee se pilla unas llantinas Carmen, que no sabes como se nos ponen...y nosotras siempre hemos sido de muchas risas.

Pues lo que te contaba, que a mí Concha Madera me suponía una referencia y un enlace generacional con todas aquellas mujeres que lucharon por defender la República.

Ya sabes que en mi casa nunca se puede hablar de ese tema, que mi madre siempre lo zanja con un "en mi pueblo no hubo guerra"....y venga...

Pero yo siempre recuerdo a mi abuela hablando con la Sñra Cayetana, y aconsejándola, así como en privado, para acabar diciéndole: mira que eres terca Caye...pero que terca eres mujer...

Cuando ya tuve uso de razón y fuí entendiendo lo que pasaba, mi admiración por ellas fue inmensa.

Resulta que a la Sñra. Caye le mataron al marido en la guerra, y la dejaron con 5 hijos que ella solita sacó adelante. Bueno, sola tampoco, que las vecinas, entre ellas mi abuela, siempre la ayudaron.

Y recuerdo la última escena en la habitación de mi abuela, que ya estaba muy malina, y la traíamos a Oviedo para cuidarla, despidiéndose de su amiga, e insistiéndole en que aceptara lo que le ofrecían. " mira, Caye,tú dices que sí, que murió en el campo, que estaba enfermo, y que te den la pensión"....
y ella:" que no Satur, que no, que a mí me lo sacaron de la cama, de noche, y me lo mataron"...

Y se murió así, unos años después que mi abuela, sin rendirse, sin pensión, pero con la cabeza bien alta, sin darles el gusto a los fascistas del pueblo de acallar sus conciencias con una paga.

Ya te dije alguna vez que con todo esto de la memoria histórica siento la necesidad de ponerme en contacto con los hijos y pedirles que me dejen reclamar los restos de su padre, que están en ese pinar que sabemos todos...y llevarlo con ella, para que sigan durmiendo juntinos, como aquella noche...

Cómo he admirado siempre a mi abuela y a su amiga. Las dos trabajando duro, comiendo poco y mal para sacar adelante a esos hijos, con la solidaridad de las vecinas, ese entramado que yo sabía que existía entre ellas, que sin hablarlo sabías que algo pasaba, algo que a l@s niñ@s no nos contaban.

Pero un día una tía mía, cuando ya se le iba la cabeza y el miedo, me dijo claramente que ella era de izquierdas, que su padre era el que llevaba la Casa del Pueblo, que era socialista de siempre. Y me lo dijo con un orgullo que tuve que darle un besazo bien grande que me salió del alma.

Luego otra vecina me contó que aquella máquina de coser con la que siempre recuerdo a la abuela de una amiga del pueblo ,no era suya, que era de la casa de enfrente, de unas chikas que se tuvieron que ir por que el abuelo les había requisado todo....

Y también me contó la madre de otro amigo, que a ella, y a otras muchas del pueblo, las habían rapado el pelo, y que tuvieron que pasear todo el arrabal de esa manera.

Cuando se lo conté a mi madre ella me dijo que se acordaba de la maestra que era buenísima, y que le hicieron lo mismo, y que se tuvo que ir del pueblo con el marido también maestro y los niños, y que luego pusieron a unos que eran malísimos y que le hicieron odiar la escuela.

Estos tan malos eran familia de una amiga que estará leyendo lo que te estoy contando, y que por casualidad me enteré de que su padre y su tío llevan nombres judíos, Aaron y Absalón, nombres que nunca utilizan, y que siempre le he querido preguntar el por qué y nunca lo he hecho, quizá pq nosotras seguimos teniendo un miedo inconsciente a "revolver" nuestro pasado,que nosotras somos todas amigas, aunque mi abuela fuera la íntima amiga de la que le sacaron el marido de la cama...aunque la abuela de la otra amiga cosiera en una máquina que no era suya...aunque el padre de nuestra amiga no se llame como dice llamarse...

No sé Carmen, pero supongo que en España tenemos que sentarnos todas una tarde de verano, quizá un 18 de julio, a la hora de la siesta, y contarnos la verdad...y volver a empezar...que esto se arregla mejor entre nosotras, que las mujeres nos entendemos mejor... a que sí?...